Tras el duatlón unos días de descanso de piernas que las llevaba "petadas" y a partir del jueves las necesitaba frescas pues nos adentramos en una nueva aventura nueva para nosotros dos (Miren y yo), nos fuimos con las MTB equipadas con sus tranportines y las correspondientes alforjas bien llenas de comida, sacos, tienda de campaña, herramientas para fabricar una bici nueva... de todo.
Salimos el Miércoles por la noche para acercarnos a nuestro pueblo de inicio de la "Ruta del Quijote" éste sería El Toboso. Chino chana fuimos recorriendo y visitando unas cuantas poblaciones de Castilla la Mancha y lugares de interés, como las lagunas de Ruidera, las Tablas de Daimiel, los famosos "Gigantes" de Quijote que son unos preciosos molinos... y un sinfin de iglesias, hermitas, puentes antiguos... Nos hizo buen tiempo por el día, pero las noches erán fríisimas así que decidimos acortar de 3 a 2 noches de tiemda ya que nos levantábamos con la tienda helada literalmente y aunque los sacos no eran de los baratos no fueron suficiente para mantenernos calientes así que ala, más de 100km por día que nos salieron y curiosamente las piernas cada vez nos respondían mejor.
Al final nos dimos una buena cena en el restaurante "QUIJOTE" (No podía llamarse de otra manera) de El Toboso para recuperar fuerzas, y con el recuerdo de haber pasado unos buenos días que aunque descansar físicamente poco, hemos desconectado de la rutina diaria y nos ha venido muy bien, repetiremos, no sabemos cuando ni donde, eso será otro cantar.
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